Desde niña he sido peligrosa con una brocha en la mano. Que se lo pregunten a mis hermanas, un día decoré una sábana blanca con esmalte rojo de uñas...El almohadón estaba bordado en ese color y la sábana no tenía nada, había que arreglarlo... Sigo con brochas y pinceles de todos los tamaños, intentando hacer de mi mundo un lugar un poco más bello. En este blog también encontraréis algunas de mis costuras y bastantes cosas recicladas, campo en el que no paro de investigar.

domingo, 28 de noviembre de 2010

Experimentos


Inventando cosas para poner jabones o regalos hice estas cestas de goma eva. Había también una rosa, pero está ya en otras manos. La forma básica del patrón es en forma de cruz, con pestañitas para pegar. Las pegué con pegamento de contacto y las dejé con una pinza en cada esquina para que se secara sin despegarse. En la blanca, unas flores de caléndula que cogí y sequé bajo mi pirámide naranja.

Esto son fondos de botellas de plástico forrados con tela. Están un poco chapuzas, pero seguro que los próximos salen mejor, de nada se aprende tanto como de los errores. Uno lo pegué con cola blanca, y el otro con pegamento universal, y parece que ambos aguantan bien a la hora de unir plástico y tela.

Una caja de cartulina, un pelín endeble. Menos mal que en la base le puse por dentro un cartón forrado con papel blanco. La he decorado un poco invernal con los copos de nieve, con un color rojo que recuerda Yule, la sangre y el renacimiento.

jueves, 25 de noviembre de 2010

¿Bolsas? ¡Sí! de tela...


Bolsas de tela, o bolsas de usar y no tirar, como escribiera en su día Garci : http://con2tijerasblog.blogspot.com/2008/02/proyecto-de-reciclaje-bolsas-de-usar-y.html
Pues eso, hace tiempo que copié la idea y nunca lo he comentado en serio y poniendo fotos, y ya tocaba. Ya van quedando pocas, menos mal que tengo muchos retales, y u día de estos habrá que ponerse a ello; es hasta divertido ir combinando telas y haciendo bolsitas.
Yo lo llamo retalear, no sé si la palabra existe.
Solo hace falta una máquina de coser, retales diversos y, por supuesto, imaginación.
Me satisface pensar que ya hay más de cien bolsas mías por el mundo ayudando a gastar menos plástico.
El próximo objetivo, llegar a las mil.